Se cumple así con lo establecido en la constitución apostólica Universi Dominici Gregis que estipula que la reunión ha de comenzar entre el decimoquinto y el vigésimo día después de la muerte del Obispo de Roma.
Se trata de dar tiempo a los cardenales a llegar a la ciudad eterna si no lo han podido hacer de forma inmediata tras el fallecimiento del pontífice para asistir a su funeral y a las congregaciones generales.
Para la elección del nuevo Papa, los cardenales votarán cuatro veces —dos en la mañana y dos en la tarde— hasta hallar una mayoría cualificada de dos tercios.
Hasta la fecha se ha confirmado la ausencia de uno de los cardenales electores, Antonio Cañizares, Arzobispo emérito de Valencia (España), por motivos de salud, por lo que serán 134 purpurados los que se encontrarán en el interior de la Capilla Sixtina cuando el Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias diga el famoso "extra omnes" (fuera todos o todos fuera) para indicar que las personas que no son cardenales electores deben abandonar la Capilla Sixtina para que se pueda iniciar la votación para elegir al nuevo Papa..
Cardenal Leopoldo Brenes en el conclave
Su Eminencia Cardenal Leopoldo José Brenes, nuestro Arzobispo, junto al colegio cardenalicio rezando las segundas vísperas en Basílica Santa María Mayor donde fue sepultado el Papa Francisco, se encuentra a la espera del inicio del conclave y hace un llamado a orar por los cardenales.